El viernes día 15 de junio, compramos en el MediaMarkt de Mataró, un televisor Sony de 55”.
De hecho, siempre hemos tenido televisores Sony por su calidad y jamás habíamos tenido ningún problema.
El sábado día 8 de agosto, la tele dejó de funcionar.
Nos fuimos a Mediamarkt y nos dieron el teléfono del servicio técnico. Llamamos y por el contestador nos enteramos que ya no trabajaban hasta el lunes.
El lunes día 10 de agosto, llamamos al servicio técnico para explicarles el caso.
Nos dijeron que en menos de 24 horas se pondrían en contacto con nosotros.
El jueves día 13, al no tener ninguna noticia, volvimos a llamar. Nos dijeron que se pondrían en contacto con nosotros.
Al día siguiente, el viernes día 14, volvimos a llamar y nos dijeron que el servicio técnico más cercano, que estaba en Badalona, estaba de vacaciones.
El lunes día 17 volvimos a llamar. Nos dijeron que tomaban nota.
El martes día 18, nos llamaron del servicio técnico que venían a mirarse la tele. Se la llevaron y nos dijeron que en una semana nos dirían alguna cosa.
Se la llevaron sin la caja.
El jueves día 24, nos trajeron la tele. Después de estar 16 días sin poder ver una tele nueva de 2 meses.
La conectaron y ya funcionaba. Pero estaba muy sucia por los lados. Parecía vieja. La estuvimos limpiando y nos dimos cuenta que la tele estaba rayada.
Enviamos fotos de los técnicos llevándose la tele y cuando la devolvieron.
Entonces, llamamos al servicio técnico. Nos dijeron que tomaban nota y avisaban al técnico.
Vino el técnico a comprobar la rayada y nos dijo que nos dirían alguna cosa.
Hace unos días, nos llamaron y nos dijeron que la garantía no cubría la rayada.
Es una vergüenza.
