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A la hora de capturar platos o dulces, sería estupendo que las fotografías reflejaran el sabor del sujeto.
Para realizar este tipo de fotografías, ten en cuenta el color y el brillo para reproducir un aspecto apetitoso de la comida cercano a la imagen real.
En primer lugar, selecciona el modo P y prueba las siguientes técnicas.
El color y la luminosidad son fundamentales para que las fotografías de platos y dulces tengan un aspecto delicioso.
Primero, ajusta el color con el balance de blancos. El balance de blancos es la función para ajustar el estándar de "blanco", pero también se puede utilizar como filtros de color en las cámaras digitales. Prueba en primer lugar el Balance de blancos automático [AWB] para ver si el resultado es el esperado y, a continuación, prueba [Daylight] o [Cloudy], según sea necesario. Si quieres ajustar aún más el color, utiliza la función de ajuste preciso del balance de blancos.
En general, los platos tienen un aspecto más delicioso cuando se capturan con un color ligeramente cálido (tono rojizo).
Estas fotografías se realizaron con distintos ajustes del balance de blancos. La foto [1] se hizo con [AWB] y parece más blanca que la imagen real, debido a la fuente de luz del restaurante. La fotografía [2] se realizó con [Daylight]. El color más cálido añadió un acabado apetecible a la imagen.
El ángulo de luz y la luminosidad también son importantes. Los platos tienen un aspecto más delicioso cuando se capturan con luz trasera. Cuando las fotografías se realizan con luz frontal, la forma y el color de los platos se representan con nitidez. Sin embargo, dado que la luz no crea sombras en el sujeto ni lo atraviesa, las imágenes no tienen profundidad y parecen planas.
La fotografía [1] se realizó con luz frontal. Las formas del pan y de la fruta se representan con nitidez, pero la imagen resulta plana, como la portada de un disco. El flash directo también crea luz frontal y produce una fotografía similar.
La fotografía [2] se realizó con luz trasera. Gracias a las sombras, el pan se representa con profundidad. Además, la fruta y el vaso de bebida parecen más suculentos gracias a la luz que los atraviesa. Al cambiar el ángulo de luz, se consigue una gran diferencia en el acabado.
Sin embargo, si realizas fotografías con luz trasera, es posible que el sujeto se oscurezca más de lo esperado debido al fondo claro. En estos casos, utiliza la función compensación de exposición. Si la comida tiene un aspecto oscuro, ajusta la exposición hacia los valores positivos para que tenga más brillo. Se trata de ajustar la exposición en función del brillo propio de la comida, con independencia de que el fondo aparezca un poco blanquecino.
En la fotografía [3], los alimentos parecen oscuros debido a la potente luz que entra en la lente.
La fotografía [4] es el resultado de aplicar la compensación de exposición a la imagen de la izquierda. Al ajustar la exposición en función de los alimentos para que sean más brillantes, la comida tiene un aspecto más delicioso.
Si intentas hacer una foto de un plato completo, con frecuencia obtendrás una fotografía de portada de disco nada interesante. Sin embargo, si tienes en cuenta la composición, podrás mejorar la atmósfera de la imagen.
De las fotografías siguientes, la [1] capturó todo el plato desde la posición de los ojos del fotógrafo. Se ve el contenido del plato, pero la fotografía resulta plana y sin sentido. Además, el resto de los platos y la vajilla del fotograma dan una impresión abarrotada.
Para mejorarla, la foto [2] se realizó acercándose lo máximo posible al plato. Lo capturó desde una distancia tan pequeña que parte de él no entra en el fotograma. Esta fotografía tiene más sentido de presencia y refleja lo delicioso que es el plato. El fondo también está más organizado.
También se recomienda hacer las fotos con orientación vertical o diagonal (con la cámara inclinada) para reflejar verazmente la profundidad.
Las lentes con distancia focal fija son útiles para la fotografía de alimentos, pues pueden crear unos fondos desenfocados estupendos. Además, dado que permiten que una gran cantidad de luz entre en la cámara, también son adecuadas para las fotografías de interior con luz tenue.
Distancia focal: 50 mm / Número F: 2,8 / Velocidad de obturación: 1/400 seg. / Compensación de exposición: +0,7
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Distancia focal: 50 mm / Número F: 2,0 / Velocidad de obturación: 1/80 seg.
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SAL50F18 |
Se trata de una lente telescópica de medio alcance para las cámaras de formato APS-C. Es ideal para realizar retratos, así como para enmarcar y aislar zonas de interés en escenas más amplias. Podrás aislar el sujeto deseado mediante el enmarcado y beneficiarte de la gran apertura máxima de la lente (F1,8) y del diseño circular para aislar el sujeto del fondo mediante el desenfoque. La gran apertura máxima también facilita la realización de fotos con poca luz, una función que se mejora mediante la estabilización de imagen SteadyShot integrada en los cuerpos de la serie α. |
SEL50F18 |
Es una lente telescópica de medio alcance con la distancia focal de 50 mm perfecta para los retratos. La gran apertura y el diseño de apertura circular pueden producir fondos con bellos desenfoques. Además, dado que funciona con el sistema de estabilización de imagen SteadyShot óptico integrado, se pueden conseguir fotos nítidas y claras en condiciones de poca luz. |
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