El impactante espectáculo visual de una puesta en escena de fuegos artificiales fue la inspiración central de nuestro nuevo anuncio de televisión del televisor BRAVIA® 4K; pero un buen espectáculo de este tipo requiere mucho trabajo. Quisimos hablar con quienes se dedican profesionalmente a ponerlos en marcha para conocer de primera mano la minuciosidad que se les dedica, por lo que nos pusimos en contacto con Titanium Fireworks, la empresa responsable de algunos de los mayores espectáculos imaginables, incluidos el de las ceremonias de inauguración y clausura de los Juegos Olímpicos de Londres 2012, sin ir más lejos.
Todos los años, alrededor de estas fechas, Titanium Fireworks se encuentra inmerso en la planificación de uno de sus eventos anuales más importantes: el espectáculo de Nochevieja en Londres. “Para algo así, contamos con un equipo de alrededor de 36 personas que trabaja durante los seis días posteriores a Navidad y continúa después de Año Nuevo”, comenta Darryl Fleming, director de Titanium Fireworks además de director creativo, responsable de algunos de los mayores espectáculos de Reino Unido. Este será el sexto año que Darryl participa en el espectáculo de Año Nuevo en Londres, aunque la intensidad y exigencia del trabajo no disminuye con los años.
Es responsable de alrededor de 10.000 elementos dispuestos para su lanzamiento desde 150 ubicaciones distintas, incluidas algunas gabarras situadas en el Támesis y varios emplazamientos a lo largo de las zonas de Embankment y el London Eye. Si el espectáculo no está listo a tiempo, sencillamente no se puede seguir adelante. “Con una emisión en directo en BBC One y 13 millones de espectadores en vivo... no podemos girarnos al cliente y pedirle otro par de horas para tener listo el trabajo. Simplemente no es una opción. Nuestros plazos de entrega están totalmente definidos, no hay negociación posible”.
Expertos en su labor
Darryl y su equipo llevan trabajando en el espectáculo de Nochevieja de este año desde mediados de septiembre, y no acabarán hasta que el último artificio haga su aparición sobre el Big Ben al comenzar Año Nuevo.
“Normalmente estoy bien hasta que llega el evento, pero la peor parte para mí son las horas previas. Tratamos de asegurarnos de que estamos listos con mucha antelación, pero uno de los retos más característicos a los que nos enfrentamos en Nochevieja en Londres es que gran parte del evento y del espectáculo en sí no se pueden equipar hasta el último minuto, incluida la zona del London Eye. No tenemos acceso a la noria para colocar los artificios hasta alrededor de las seis de la tarde del mismo día 31 de diciembre, por lo que esta parte tan crucial del espectáculo se crea con tan solo dos horas de margen... Es muy estresante”.
Cada espectáculo de fuegos artificiales de Titanium Fireworks requiere varios meses de planificación desde su inicio a su fin. En primer lugar, es necesario seleccionar la música, que “en gran medida dicta el ritmo, el volumen y la intensidad del espectáculo”. A continuación, Darryl comienza a diseñar el espectáculo en sí, proceso que puede llevar desde cuatro o cinco días hasta un mes. “Para mí es parecido a escribir un libro”, explica entusiasmado. “Algunas veces estás inspirado, te sientas 12 horas seguidas y empiezan a salir páginas y páginas de prosa, pero otras sientes que no estás ahí. No me gusta forzar el proceso creativo, por lo que en ocasiones me tengo que tomar un día libre o apartarme del trabajo unas horas para volver a centrarme en ello”.
Celebración del detalle
Una vez completado el proceso creativo, el equipo comienza a enfrentarse a problemas más relacionados con la logística. Es necesario seleccionar, numerar, secuenciar y empaquetar cada elemento pirotécnico para posteriormente transportarlo al evento (una caja cada vez). “El peligro aumenta por el sencillo hecho de que manejamos explosivos. No se puede descargar todo un camión de fuegos artificiales en una barca para colocarlos. Todo el proceso se planifica cuidadosamente para que se trate literalmente de una caja cada vez".
Una vez el espectáculo ya está equipado y se realizan las últimas comprobaciones, es cuando el equipo puede relajarse y disfrutar, respirar el ambiente de la noche. “En cuanto el espectáculo acaba, se liberan todas esas tensiones y se respira el alivio, y uno puede asimilar toda la ovación del público. [Con los espectáculos de Nochevieja], cuando hay un cuarto de millón de personas en Embankment aplaudiendo, animando, abrazándose y deseándose un feliz Año Nuevo, sientes que has hecho un buen trabajo. Esa euforia se va haciendo adictiva”.
Aunque seguramente sea difícil superar la sensación de ver un trabajo propio iluminar los cielos del centro de Londres, el espectáculo favorito de Darryl hasta la fecha tuvo lugar a 700 km, en el 50º aniversario del puente Forth Road de South Queensferry, Escocia. “Fue el mayor espectáculo de fuegos artificiales que se haya creado en el país desde el Millennium. Su tamaño y escala fueron algo digno de contemplación; fue un proyecto muy especial en el que involucrarse. Cuando la cascada de un kilómetro surgió del puente y comenzó a fluir suavemente por el río, me recorrió un inmenso escalofrío por la espalda”.
En Titanium Fireworks realmente dominan su oficio. Pasan meses optimizando sus espectáculos para ofrecer una experiencia de entretenimiento increíble; creemos que es necesario apreciar cada mínimo detalle. Compartimos esta máxima de la atención al detalle con los ingenieros de nuestros nuevos televisores BRAVIA® 4K; exactamente por eso quisimos aunar las dos experiencias, que la tecnología 4K de Sony diera vida a cada uno de nuestros cohetes.
