Instagram se ha convertido en parte de la vida de millones de personas en todo el mundo. Compartir una imagen en esta plataforma forma ya parte de los quehaceres diarios, los cuáles se han transformado en un motivo ideal para ser retratados y compartidos en la Red. Sin embargo, para muchos, Instagram no es sólo una parte de sus vidas. Instagram es su vida.
Hace casi cinco años años, Phil González se dio cuenta del enorme potencial que tenía Instagram, y decidió crear un blog, llamado www.instagramers.com, para ayudar a la gente a disfrutar de la mejor manera posible de la aplicación, con consejos de uso,etc. “Llevaba más de 10 años trabajando en Internet y desarrollando apps, y cuando apareció Instagram noté que todo el mundo que lo probaba se enganchaba, que se creaban sentimientos, relaciones, interacciones,…”, recuerda. “Me di cuenta que iba a ser una aplicación que iba a cambiar el mundo de la comunicación, de la publicidad y de las redes sociales en general”.
“Creo que a día de hoy Instagram es omnipresente”, asegura este francés afincado en Madrid, quien tras crear su blog, empezó a desarrollar diversos grupos de fans de Instagram, que desde el primer momento no dejaron de crecer hasta llegar a más de 500 puntos geográficos en 80 países. “Es una herramienta que fomenta la creatividad, el entretenimiento y las relaciones entre personas, además de haber cambiado las formas de captar, contar las cosas o hacer periodismo. Nadie ha podido con el efecto Instagram, ni el propio Twitter. Hemos casado a Instagramers, hemos tenido Instababies de parejas que se habían conocido en Instagram, otros han encontrado trabajo, otros descubrieron sus mejores amigos,…”.
A día de hoy, Phil organiza concursos con marcas e instituciones que permiten promover el turismo, la gastronomía o sus propios productos, que siempre terminan en un reconocimiento real y físico en lugares como galerías. Asimismo, Phil intenta ayudar a que la aplicación continúe mejorando.
“Llevamos reclamando a Instagram desde hace unos cuantos años, unas mejoras que permiten sobre todo el gestionar mejor tu cuenta o descubrir nuevos usuarios. Por una parte, Instagram nos hizo caso al añadir la mensajería directa y está desarrollando algo que pedimos a gritos, que es la posibilidad de manejar varias cuentas desde un mismo dispositivo. También han mejorado el poder descubrir nuevos perfiles. Pero mi gran caballo de batalla sería que nos permitan crear listas personalizadas”.
Phil también ha encontrado en la aplicación un espacio para compartir sus momentos. “Mi Instagram soy yo. Y mis fotografías van evolucionando en función de mi vida, de mi estado de ánimo o proyectos donde participo. Lo que no suelo hacer (ni recomendar a nadie) es ir pegando bandazos y cambiar de estilos en cada foto. Suelo aconsejar a la gente que siga un estilo durante un tiempo, y si se aburre pasar a otro, pero que no cambien cada día. No queda coherente la cuenta”.
Para ello, este Instagrammer cuenta con la ayuda inestimable de su Sony a6000 y su teléfono Xperia Z5. “Desde hace unos 5 años, dejé de usar cámaras réflex porque no me parecían cómodas, y fue cuando Instagram me conquistó”, afirma Phil. “Ya no voy a ningún sitio sin mi móvil, pero me gusta también poder usar una cámara compacta que me dé más posibilidades de grabación de vídeos y de alta resolución. Me compré hace unos meses la Sony A6000 y estoy encantado con su rendimiento y su tamaño que para mí es un factor importante.
También gracias a Instagram, Phil ha conocido a gente del mundo entero, descubierto países, culturas, otras formas de relacionarse y, sobre todo, el poder de la comunidad y de lo que pueden hacer grupos que se organizan alrededor de una misma pasión. Además, este francés residente en Madrid ha podido vivir cosas increíbles que nunca hubiera podido imaginar, como ser embajador en redes sociales de grandes marcas, estar en los ‘boxes’ con Valentino Rossi, Jorge Lorenzo y el equipo Movistar de MotoGp, o retransmitir la Fórmula 1 desde el mismo ‘box’ de McLaren. “He conocido a fotógrafos, cineastas, artistas, cantantes, periodistas y mucha gente innovadora y creativa. Es un sueño que dura ya 5 años y que cada día pienso que algún día acabará”.
Pero mientras eso no ocurra, Instagram seguirá siendo el sueño de un niño al que siempre le gustó pintar y dibujar, y que a los diez años empezó a plasmar y conservar en fotografías su propia visión del mundo. Porque él lo tiene muy claro: “Instagram es aún una app de futuro”.
